Almacenamiento industrial: cómo organizar la mercadería
No siempre es fácil poner en práctica esta tarea, especialmente si es imprescindible hacerlo y no se sabe por dónde empezar. De hecho, si se logra conseguir un almacenamiento industrial óptimo, todo el funcionamiento del depósito mejorará, la logística será más fluida y la manipulación, más fácil.
Determinar las características de cada una de las referencias
Incluso antes de empezar a organizar la mercadería o productos, es necesario clasificarlos del siguiente modo:
- Naturaleza: ¿Es un producto gaseoso, sólido o líquido?
- Embalaje: ¿Cómo están envasadas las referencias? ¿Se colocan en un pallet, rack, bidón, ropero o tonel?
- Características: ¿qué dimensión, peso y volumen tiene la mercadería?
- Condiciones ambientales: algunas mercaderías son más sensibles que otras al calor, la humedad, la vibración o la luz.
Estos elementos permiten hacernos una idea sobre cómo organizar la mercadería de la mejor manera posible. De hecho, la mercadería líquida de gran peso y sin envasar no requiere el mismo método de almacenamiento que una sensible a la intemperie, por ejemplo.
Elegir un sistema o solución de almacenamiento
Una vez determinadas todas las características de las referencias almacenadas, ya se puede pasar al siguiente paso y elegir la solución de almacenamiento en función de las necesidades de cada uno. Es fundamental elegir material de almacenamiento de calidad que dure lo suficiente para que la inversión sea rentable.
Para ello, conviene tener en cuenta los siguientes elementos:
- La rotación de las referencias: de hecho, si por ejemplo tus referencias tienen una tasa de rotación baja, sería más apropiado optar por un sistema de almacenamiento como racks penetrables.
- Su caducidad: el rack dinámico suele ser el método que mejor conviene a aquellas empresas que almacenan productos alimenticios.
- El tipo de depósito: ¿es un depósito frigorífico, tradicional o una mensajería?
- Tus objetivos: ¿estás pensando en automatizar tu depósito o no?, compará todos los pros y contras de los métodos de almacenamiento automático.
Para elegir la solución de almacenamiento adecuada, es fundamental definir todos estos elementos. Esto te ayudará a mantener la seguridad y el buen funcionamiento de la organización.
Incluir referencias en los racks, contenedores, etc.
Cada uno de estos elementos es una parte integral del depósito, por lo que deberían tener referencias o identificaciones antes de cualquier otro proceso de almacenamiento.
Este sistema es imprescindible para garantizar un seguimiento del material adecuado y no solo de la mercadería.
De este modo, se puede incluir referencias en el equipo separándolo en diferentes categorías, como racks, contenedores, autoelevador, etc.
Para realizar un correcto seguimiento del material del depósito y, por tanto de su mantenimiento, es imprescindible cumplir con este punto.
Realizar regularmente un mantenimiento
Para que el depósito se encuentre siempre perfectamente ordenado, es necesario programar sesiones de control y de mantenimiento periódicos.
El mantenimiento del material te ayudará a mantener la mercadería en buenas condiciones de almacenamiento y evitar faltantes y accidentes.
Revisar periódicamente los procesos de almacenamiento
Los pasos anteriores son un ciclo sin fin: de hecho, es recomendable empezar de nuevo periódicamente todo el proceso. El objetivo de esto último es garantizar la eficacia, productividad y optimización de la organización.
Si una empresa detecta la necesidad de revisar el diseño del depósito, es todavía más imprescindible, si es necesario, volver a empezar todo el proceso de almacenamiento industrial.
Para trabajar en logística, las palabras clave son «almacenamiento» y «organización». Sin organización, las empresas pierden dinero, tiempo, disminuyen la seguridad de sus establecimientos, aumentan los daños y se exponen, por consiguiente, a la posibilidad de no satisfacer a sus clientes.